El paseo solidario de coches clásicos en Burgos ha cumplido cinco años. Organizado por el Club Burgalés de Vehículos Históricos y la Asociación Española Contra el Cáncer, el evento reunió a casi treinta vehículos históricos. Entre ellos, un Ford T de 1915 y un Cadillac de 1969.
Julián Angulo, presidente del club, destacó la importancia de esta causa, ya que muchas familias han sido afectadas por el cáncer. Los burgaleses respondieron con entusiasmo, llenando todas las plazas disponibles para las rutas. El objetivo era superar los 5.200 euros recaudados el año pasado.
Eduardo González Campo, presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer, subrayó que el evento busca visibilizar la enfermedad y normalizar la conversación sobre ella. Aseguró que el cáncer no debe ser visto como sinónimo de muerte.
Este año, el evento coincidió con el primer fin de semana cidiano, lo que aumentó la participación. Además, se destina aproximadamente el 18% del presupuesto a la investigación. En el evento, estuvo presente Marcos Araúzo, un investigador que trabaja en un proyecto sobre el glioblastoma utilizando Inteligencia Artificial.


