Recientemente, dos menores fueron denunciados por hacer 11 grafitis en Burgos. Los hechos ocurrieron cerca del río Arlanzón, donde una vecina alertó a la Policía Local. Ella vio a los jóvenes pintando en las fachadas de edificios junto a los cines Van Golem. La mujer proporcionó detalles sobre su vestimenta y dirección.
Poco después, una patrulla interceptó a los chicos en la calle Vitoria. Al ser preguntados, negaron su implicación. Uno de ellos, de 15 años, llevaba un aerosol casi vacío. Inicialmente, dijeron que lo habían encontrado. Sin embargo, tras varias preguntas, comenzaron a confesar.
Los menores acompañaron a los agentes para mostrar los lugares donde habían pintado. Tras la denuncia, se levantó un acta de sanción. Al ser menores de edad, se contactó a sus padres, quienes se hicieron cargo de ellos. La situación resalta la importancia de la responsabilidad en el uso del espacio público.



