Los colegios diocesanos de Burgos han dado la bienvenida al nuevo curso en la Plaza de Santa María. Alumnos de 5º de Primaria y 1º de Secundaria de siete centros, integrados en la Fundación Manjón Palencia, participaron en una jornada festiva. El arzobispo de Burgos, Mario Iceta, destacó la ilusión del profesorado por ofrecer lo mejor a las familias y alumnos.
La comunidad educativa cuenta con 350 profesores y 50 trabajadores de apoyo, que atienden a 4.670 estudiantes. Sin embargo, las aportaciones de las administraciones públicas se han mantenido congeladas. Andrés Picón, director de la Fundación, explicó que esto afecta la financiación de salarios y gastos operativos.
A pesar de estos desafíos, los alumnos disfrutaron de un día de convivencia, bajo el lema ‘Amor -Arte’. Este año, las escuelas diocesanas también abordarán la educación afectivo-sexual en sus programas. Picón subrayó la importancia de educar en valores cristianos en los barrios más populares de la ciudad.



