El Ayuntamiento de Burgos ha decidido reforzar la Brigada de Plagas, que actualmente cuenta con dos efectivos. Esta ampliación busca mejorar la respuesta a los avisos de los ciudadanos. Carlos Niño, concejal de Medio Ambiente, aseguró que no hay una plaga de roedores en la ciudad. Las quejas recibidas no han aumentado significativamente y muchas son repetidas.
El concejal también recordó que el Ayuntamiento no puede intervenir en propiedades privadas, donde los propietarios son responsables del mantenimiento. En cuanto al control de aves, se ha detectado un aumento de la paloma torcaz. En el último año, se han capturado entre 2.000 y 3.000 ejemplares como parte del programa municipal de control.
Además, el Ayuntamiento ha adjudicado la elaboración del II Plan Municipal de Salud. Este plan deberá completarse en ocho meses y tiene como objetivo analizar la situación sanitaria del municipio. También establecerá líneas de actuación para fomentar hábitos de vida saludables entre los burgaleses.




