Kylian Mbappé vivió una noche destacada el pasado domingo frente al Barcelona, marcando en el clásico por cuarta vez consecutiva. El delantero francés logró su primera victoria ante el conjunto blaugrana desde abril de 2024, cuando jugaba en el Paris Saint-Germain. Mbappé anotó un gol válido y otros dos que fueron anulados por fuera de juego. Además, participó en 21 acciones con balón, realizó cinco remates a puerta y alcanzó un 91% de acierto en el pase, con solo cuatro pérdidas.
Sin embargo, la actuación de Mbappé incluyó un penalti fallado en torno al minuto 50. El guardameta Wojciech Szczesny detuvo el lanzamiento, convirtiéndose en el primer portero que evita un gol de penalti al Real Madrid en un clásico desde 1991, cuando Andoni Zubizarreta paró un penalti a Emilio Butragueño. A pesar de este fallo, Mbappé suma ya cinco goles ante el Barcelona en los últimos enfrentamientos, incluyendo un triplete en Montjuïc.
Por su parte, Jude Bellingham también fue determinante. El centrocampista inglés asistió a Mbappé en el primer gol y marcó el segundo tanto del partido, sumando dos partidos consecutivos anotando. Bellingham participó en 53 acciones con balón, completó 19 pases, generó dos ocasiones y remató cinco veces. Su rendimiento ante el Barcelona contrasta con su registro frente al Atlético de Madrid, donde aún no ha marcado en ocho derbis disputados.



