La Formación Profesional (FP) agraria en Castilla y León ha experimentado un crecimiento del 28 % en los últimos cinco años. Actualmente, el número de alumnos matriculados en esta especialidad asciende a 761, según los últimos datos disponibles.
Este aumento refleja una tendencia al alza en la demanda de estudios relacionados con el sector agrario en la comunidad. La Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León (JCYL) ha destacado la importancia de la FP agraria para responder a las necesidades del sector primario y favorecer el relevo generacional en el campo.
La oferta formativa incluye ciclos de grado medio y superior en diferentes especialidades, como producción agropecuaria, jardinería y gestión forestal. Estos estudios se imparten en varios centros educativos repartidos por la comunidad autónoma.
El incremento de alumnos en la FP agraria coincide con el impulso de la JCYL a la formación profesional dual, que combina la enseñanza en el aula con prácticas en empresas del sector. Esta modalidad busca mejorar la empleabilidad de los jóvenes y adaptar la formación a las demandas del mercado laboral.
El sector agrario en Castilla y León representa una parte significativa de la economía regional. La formación de nuevos profesionales es considerada clave para garantizar su sostenibilidad y modernización en los próximos años.
