El Cementerio de San José, en Burgos, ha experimentado un descenso en el número total de inhumaciones hasta septiembre de 2025. Se han registrado 800 enterramientos, un 4,6% menos que en el mismo periodo de 2024, cuando hubo 839. Esta cifra es la más baja de los últimos años, alejándose de los 865 de 2023 y los 878 de 2022.
A pesar de la reducción global, la inhumación de cenizas muestra una tendencia al alza. En los primeros seis meses de 2025 se realizaron 188 inhumaciones de cenizas, lo que representa el 23% del total y supone un incremento del 1,6% respecto al año anterior, cuando se contabilizaron 185. En dos años, esta práctica ha crecido un 6%, ya que en 2023 se registraron 177 depósitos de cenizas. Sin embargo, las cifras actuales se mantienen lejos de los máximos alcanzados durante la pandemia y la postpandemia, cuando en 2022 se realizaron 228 inhumaciones de cenizas.
El número de enterramientos de cuerpos, la fórmula más tradicional, sigue disminuyendo. En 2025 se han registrado 654, un 6,4% menos que en 2024. El mes con más inhumaciones fue abril, con 112, seguido de enero con 111 y julio con 105. El uso del columbario continúa en aumento, y el Ayuntamiento estudia ampliar estas instalaciones y mejorar la infraestructura del cementerio.
