El expediente para el tramo inicial de la autovía A-12, que unirá Burgos e Ibeas de Juarros, ha superado en seis meses el plazo máximo fijado por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, dirigido por Óscar Puente. El retraso se debe a la inclusión de nuevas peticiones y a contratiempos técnicos surgidos durante la redacción del proyecto.
Las modificaciones aprobadas contemplan dos nuevas conexiones: una enlazará la A-1 con la carretera BU-800, facilitando el acceso a Cardeñadijo y Fuentes Blancas; la otra conectará la A-12 con San Medel y el futuro Parque Tecnológico, situado junto a la N-120 a la salida de Castañares. El Ministerio considera que estas conexiones mejorarán la accesibilidad y conectividad de la zona.
El desarrollo de estas infraestructuras coincide en 3,6 kilómetros con la ampliación del tercer carril de la AP-1 en el entorno de Burgos, lo que ha obligado a una planificación precisa para evitar interferencias entre ambas obras. El retraso en la ampliación de la AP-1 afecta a la ejecución prevista para la A-12, aunque los técnicos han planteado soluciones para avanzar en ambos proyectos.
La construcción de los primeros 5,6 kilómetros de la A-12 requerirá más de 120 millones de euros. El Ministerio de Transportes ha descartado prolongar este tramo para evitar la travesía por Ibeas, argumentando que obligaría a reiniciar los expedientes de los tramos afectados.




