La Cueva de Roa enfrenta una división en su gobierno local por la construcción de un nuevo centro de usos múltiples. La concejala del PSOE, Sara Meneses, critica al alcalde Ignacio Arranz por priorizar este proyecto, que ya ha costado casi un millón de euros desde 2018. Meneses argumenta que el dinero debería destinarse a resolver el problema del agua potable, que afecta a 80 vecinos y lleva un año sin solución.
La concejala ha solicitado en dos ocasiones acceso a la información sobre el gasto del centro, pero solo ha recibido respuestas incompletas. Según ella, el alcalde no ha cumplido con la legislación de transparencia. La última respuesta del Ayuntamiento llegó tarde y no aclaró las dudas sobre las inversiones realizadas.
Meneses también expresa su preocupación por la falta de documentación en el archivo municipal y exige claridad en la contabilidad del proyecto. Critica que, mientras se invierte en un edificio innecesario, se ignoran otras necesidades urgentes del pueblo, como la reparación de aceras y calles.
A pesar de recibir insultos anónimos, Meneses se mantiene firme en su postura. Asegura que la obra más costosa del pueblo debe ser transparente y justificada.
