Durante la celebración del Día de la Provincia en Villadiego, el presidente de la Diputación de Burgos, Borja Suárez, destacó la intención de la institución de convertirse “en el gran motor de desarrollo” de la provincia. Esta afirmación la hizo ante autoridades locales y autonómicas, como el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo. Suárez subrayó la capacidad de la Diputación para identificar problemas y proponer soluciones, así como para facilitar el diálogo entre los ayuntamientos y otras administraciones relevantes, como la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España.
El presidente también enfatizó la riqueza y el potencial de Burgos dentro de Castilla y León, haciendo un llamado a valorar el legado municipal, que incluye la labor de alcaldes y concejales en los pueblos. En relación con Villadiego, municipio anfitrión del evento, destacó su constante progreso y economía sana, considerándolo un modelo a seguir. Fernández Carriedo, en su intervención, señaló la importancia de la jornada como un reconocimiento a los municipios y planteó retos futuros para consolidar servicios públicos y mejorar la economía. En resumen, ambos líderes coincidieron en el valor de Burgos y su capacidad para contribuir al bienestar de la comunidad.



