La Guardia Civil ha incautado 720 kilos de hachís en la autovía A-1, en la comarca de la Ribera del Duero. Los agentes detectaron una furgoneta que conducía de forma irregular y decidieron seguirla. El conductor, al notar la presencia policial, emprendió una peligrosa huida. Tras varios kilómetros en dirección contraria, sufrió un accidente y abandonó el vehículo a pie.
Al inspeccionar la furgoneta, los agentes encontraron 20 fardos de hachís, que fueron confirmados como tal. Este es el mayor alijo de esta droga interceptado en Burgos. La furgoneta había sido robada en agosto y tenía matrículas alteradas.
La Guardia Civil ha abierto una investigación para localizar al conductor y esclarecer los delitos de robo y falsedad documental. Además, se recuerda que existe un plan específico para combatir el tráfico de hachís en las carreteras españolas. Para cualquier información, se puede contactar con el número 062 o a través de la app Alertcops.
