Agentes de la Policía Nacional de Burgos han detenido recientemente a un hombre como presunto autor de un delito de acoso grave y continuado contra el titular y las empleadas de una clínica dental de la ciudad. El investigado era cliente de la clínica desde 2021 y, tras varios tratamientos, comenzó a mostrar desacuerdos con los precios y las indicaciones médicas.
Según los perjudicados, en 2023 dejaron de atender al detenido tras un incidente en el que empujó a una empleada. Desde entonces, el hombre habría enviado mensajes amenazantes de forma periódica a través de WhatsApp al teléfono de la clínica y causado daños en el rótulo de la entrada. Además, colocó notas manuscritas con amenazas en la puerta del establecimiento.
Durante meses, los responsables de la clínica no presentaron denuncia. Sin embargo, el pasado mes, el investigado acudió al domicilio particular del titular y le amenazó verbalmente, lo que motivó la denuncia ante la Policía Nacional. Los afectados han declarado que la situación ha perjudicado tanto a su reputación profesional como a su bienestar personal, generando ansiedad entre propietarios y trabajadoras.
La investigación continúa abierta y el detenido está siendo investigado por un presunto delito de acoso reiterado y grave.




