El Ingreso Mínimo Vital (IMV) es una ayuda gestionada por la Seguridad Social y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Su objetivo es proteger a personas en situación de vulnerabilidad económica y riesgo de pobreza, facilitando su inclusión social y acceso al empleo.
En septiembre de 2024, en la provincia de Burgos se abonaron 3.666 prestaciones del IMV. Estas ayudas beneficiaron a 11.777 personas, lo que representa el 3,27% de la población provincial. Burgos se sitúa entre las provincias de Castilla y León con menor dependencia de este ingreso, solo por encima de Soria. Sin embargo, el número de prestaciones aumentó un 20% respecto al mismo mes del año anterior.
El perfil mayoritario de los beneficiarios en Burgos corresponde a mujeres españolas con hijos menores a su cargo. Los menores representan casi el 45% de los beneficiarios. El IMV está destinado a cubrir necesidades básicas como alimentación, vivienda e higiene. Es la última opción para quienes no pueden acceder a otras ayudas, como el subsidio para mayores de 52 años sin prestación contributiva, pensiones no contributivas, o para víctimas de violencia de género, trata de personas, personas sin hogar o procedentes del sistema de protección de menores.
A pesar del incremento, persiste un amplio desconocimiento sobre esta prestación entre potenciales beneficiarios en la provincia.

