El Ayuntamiento de Miranda de Ebro y la Junta de Castilla y León han acordado modificar el plan antirriadas en la Ronda del Ferrocarril. El objetivo es reducir el impacto de las riadas sin afectar la accesibilidad. La nueva propuesta se presentará a los vecinos antes de tomar una decisión final.
La elevación máxima de la rasante se reducirá de 70 a 41 centímetros en el cruce con la calle Arenal. Esto elimina la necesidad de construir nuevos muros y rampas, manteniendo solo las adaptaciones necesarias en elementos existentes. También se nivelarán las aceras en las esquinas del cruce para mejorar la integración urbana.
En el tramo frente al número 21 de Ronda del Ferrocarril, se elevará la acera unos 15 centímetros para corregir desniveles. Las escaleras y la rampa del número 14 se adaptarán a la nueva altura sin crear barreras arquitectónicas.
Aunque esta solución no ofrece la misma protección contra inundaciones que la original, mejora la accesibilidad y evita obras más invasivas. La alcaldesa y otros concejales se reunieron con el director general de la Junta para discutir estos cambios. Se espera convocar a los vecinos pronto para que puedan opinar sobre el proyecto.
