Un total de casi 300 profesionales y voluntarios de Burgos han recibido formación específica para actuar en situaciones de emergencia. Entre los participantes se encuentran bomberos, agentes de la Policía Local y miembros de Protección Civil. El objetivo de estos cursos es mejorar la coordinación y la eficacia en la respuesta ante incidentes que puedan afectar a la seguridad ciudadana.
Las sesiones formativas incluyen simulacros prácticos y talleres sobre primeros auxilios, evacuación y control de incendios. Además, se abordan protocolos de actuación conjunta entre los distintos cuerpos de seguridad y emergencias. La formación se desarrolla en varias jornadas, con la participación de instructores especializados.
Esta iniciativa busca reforzar la preparación de los equipos que intervienen en situaciones críticas, como incendios, accidentes de tráfico o catástrofes naturales. Los organizadores destacan la importancia de la actualización continua de conocimientos para garantizar una respuesta rápida y eficaz.
La formación se enmarca dentro de los planes municipales de prevención y gestión de emergencias. Las autoridades locales subrayan la colaboración entre los diferentes servicios como un factor clave para la seguridad de la población. Está previsto que este tipo de actividades se repitan periódicamente para mantener el nivel de preparación de los efectivos.




