La Junta de Castilla y León (JCYL) ha anunciado que todas las áreas de salud de la comunidad dispondrán de unidades de afrontamiento del dolor crónico antes de que finalice el año 2024. El objetivo es mejorar la atención a los pacientes que sufren este tipo de dolencias, facilitando el acceso a tratamientos y terapias especializadas.
Estas unidades estarán integradas en los servicios sanitarios de cada área de salud. Su función principal será ofrecer un abordaje multidisciplinar del dolor crónico, incluyendo atención médica, psicológica y de rehabilitación. La medida busca reducir el impacto del dolor crónico en la calidad de vida de los pacientes y optimizar los recursos sanitarios.
El despliegue de estas unidades responde a la demanda de profesionales y asociaciones de pacientes, que reclamaban una atención más específica y coordinada. La JCYL prevé que la implantación esté completada en todas las provincias antes del 31 de diciembre de 2024.
Actualmente, algunas áreas de salud ya cuentan con este tipo de unidades, pero el objetivo es que la cobertura sea total en toda la comunidad. La Junta no ha detallado el número exacto de profesionales que formarán parte de cada unidad ni el presupuesto destinado a este proyecto.
La iniciativa forma parte de la estrategia regional para la mejora de la atención sanitaria y la humanización de los servicios de salud en Castilla y León.


