El Ayuntamiento de Burgos ha anunciado que modificará los precios de los abonos deportivos para empadronados y no empadronados. Esta decisión llega tarde, después de dos años de trato desigual. La situación se hizo evidente tras una resolución del Procurador del Común y una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a los ayuntamientos a cumplir con la ley.
El concejal de Deportes, César Barriada, había afirmado anteriormente que no había planes para cambiar la ordenanza. Sin embargo, la portavoz del Equipo de Gobierno, Andrea Ballesteros, justificó el retraso por la carga de trabajo en las áreas municipales.
El proceso de modificación comenzará con una aprobación inicial en el Pleno, prevista para el 17 de octubre. Después, habrá un mes de exposición pública antes de que se lleve a cabo otra sesión plenaria, posiblemente en noviembre o diciembre. Finalmente, el cambio se publicará en el Boletín de la Provincia para oficializarlo.
Este retraso ha generado críticas hacia el Equipo de Gobierno de Cristina Ayala, que ha tardado en cumplir con la ley. Si se hubiera actuado antes, Burgos podría haber regularizado esta situación desde principios de 2024.




