La Fiscalía ha solicitado penas de hasta 18 años de cárcel para una sobrina y el director de una residencia. Se les acusa de internar a una anciana de 92 años en un centro de Madrid sin su consentimiento. La sobrina, M.S.O., llevó a la mujer engañada, haciéndole creer que iba a pasar unos días con ella. Una vez allí, la internó sin permitirle despedirse de su familia ni llevarse sus pertenencias.
La anciana, que vivía en Burgos, había otorgado un poder notarial a su sobrina, pero mantenía capacidad para decidir sobre su vida. Durante su estancia en la residencia, la mujer no tuvo acceso a sus audífonos ni gafas, lo que agravó su estado físico y emocional. La Fiscalía destaca que el director, V.L.V., restringió las visitas familiares y actuó en connivencia con la sobrina.
Se estima que M.S.O. utilizó 36.066,25 euros de su tía sin autorización y pagó 16.961,36 euros al director por el internamiento. Además, se le acusa de haber robado joyas y un abrigo de piel de la anciana. El juicio está programado para el 29 de octubre en Burgos.



